La serie se emitirá por Prime Video, a partir de mañana.
Dirigida por Julian Jarrold, la miniserie trata el detrás de escena que llevó a la desastrosa entrevista, transmitida en noviembre de 2019, del predilecto de la reina Isabel II, con Emily Maitlis, periodista del programa Newsnight de la BBC.
En el papel de Andrés, Michael Sheen (quien encargó al expremier Tony Blair en The Queen, en 2006) mientras que Ruth Wilson (The Affair, 2014-2018) interpretará a Emily Maitlis.
La propia periodista británica se desempeñó como productora ejecutiva de la serie.
El duque de York aceptó hacer la entrevista pensando en limpiar su imagen tras el escándalo por acusaciones de pederastia y su vinculación con el Caso de Jeffrey Epstein.
En realidad, resultó ser un boomerang porque no mostró ninguna empatía con las víctimas y negó haber tenido relaciones con Virginia Giuffre, una de las chicas implicadas en el tráfico del financista estadounidense, quien lo acusó de violarla cuando aún era menor de edad.
A diferencia de "Scoop", la película producida por Nerflix y estrenada en la plataforma de streaming en marzo pasado, la cual gira en torno al trabajo de la productora de la BBC Sam McAlister para obtener la entrevista, "A Very Royal" Scandal se centra en el poder del periodismo, el mismo que logró poner de rodillas a un miembro de la realeza.
"Todo cambió", comentó la propia Maitlis en una reciente entrevista con la BBC.
"Perdió el respeto de la nación (el príncipe Andrés, ndr.), pero creo que todavía es una cuestión sin resolver porque las víctimas de Jeffrey Epstein no pudieron dejar atrás el asunto, nunca hubo un juicio", prosiguió.
El príncipe Andrés siempre negó haber mantenido una relación sexual con la entonces menor de edad Virginia Giuffre.
Incluso dijo que durante el día del encuentro estaba en Pizza Express, una pizzería en Woking, a unos 35 kilómetros de Londres.
La miniserie saldrá al aire en un momento en el que las consecuencias de su amistad con Epstein y de la entrevista aún pesan sobre el duque de York.
De hecho, le llegó un ultimátum de su hermano, el rey Carlos III: deberá pagar de su propio bolsillo los gastos de mantenimiento y seguridad de la Royal Lodge, su residencia en Windsor que comparte con su ex esposa Sarah Ferguson o se verá obligado a abandonarla.
Hace unas semanas, los medios británicos hablaban de la voluntad del tribunal de no renovar el contrato de los guardias privados que garantizan la seguridad de la villa para ahorrar tres millones de libras al año.
A Andrés, por lo demás, se le ofreció la alternativa de mudarse a Frogmore Cottage, donde se hospedaron Harry y Meghan antes de mudarse a California.
TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS © Copyright ANSA