"No creo que me sancionen, pero si así fuera no sería el fin del mundo", auguró hoy el neerlandés Max Verstappen frente al recurso presentado por Mercedes por su maniobra en el Gran Premio de Brasil contra el británico Lewis Hamilton, que ganó dando cátedra en Interlagos y redujo su desventaja con su colega de Red Bull en la lucha por el título de la Fórmula 1.
Ahora son 14 los puntos que los separan en la cima y que el séptuple campeón mundial intentará colmar el próximo fin de semana en Losail, escenario de la antepenúltima competencia de la temporada en la que Verstappen manda con 332,5 unidades contra 318,5 del piloto de Mercedes, que no parece dispuesto a abdicar al trono.
Como si algo le faltase a este electrizante cierre del campeonato, al que Hamilton le puso una dosis de suspenso adicional tras imponerse en el Gran Premio de Brasil pese a haber partido desde el décimo puesto, su equipo presentó un recurso contra el líder del certamen por una maniobra que protagonizaron en la cuadragésimo octava vuelta cuando luchaban por el liderazgo de la competencia.
Los comisarios desestimaron cualquier infracción al reglamento y atribuyeron lo sucedido a un episodio normal de carrera, pero Mercedes presentó "nuevas pruebas que no estaban disponibles en ese momento", como las imágenes registradas desde el Red Bull del propio Verstappen que lo incriminan por un supuesto movimiento agresivo e intencional contra Hamilton que obligó al británico a salirse de pista.
"Somos pilotos y sabemos exactamente qué podemos y qué no podemos hacer", se defendió hoy el neerlandés al explicar que cuando ocurrió la maniobra protestada por la escudería alemana "los neumáticos estaban gastados y nos separamos muy tarde, pero si me hubiese desviado más bruscamente, me hubiera despistado".
"Sólo intenté controlar mi máquina y hoy haría exactamente lo mismo", completó el de Red Bull al asegurar que en ningún momento infringió el reglamento en esa cuestionada maniobra reclamada por Mercedes, cuyo recurso -dijo- "no me sorprende".
"Fue una lucha dura, pero leal entre dos pilotos que se están jugando el campeonato y me divertí con esa gran batalla", agregó Verstappen al reconocer que el triunfo de Hamilton "fue justo porque era más veloz que yo".
La victoria del séptuple campeón mundial en Interlagos tuvo tintes épicos porque sufrió dos penalizaciones: perdió cinco puestos en la grilla por reemplazar el motor de combustión interna de su W12 y luego fue relegado al fondo de la que adjudicó la pole en la última Sprint Race del año por una irregularidad en el DRS, pese a lo cual logró el quinto puesto en la clasificación.
Partiendo desde el décimo casillero, Hamilton terminó conquistando un triunfo que lo refrenda como el gran campeón que es y elevó su "cotización" como favorito a repetir en Losail, que por primera vez albergará un Gran Premio de Fórmula 1 y lo hará con luz artificial.
Verstappen, que le había sacado dos puntos de ventaja en la Sprint Race que le otorgó la pole al finlandés Valtteri Bottas, compañero del británico en Mercedes, terminó segundo en Brasil y limitó los daños gracias al récord de vuelta que impuso su compañero mexicano Sergio Pérez en el último giro de la competencia.
Lo visto en Interlagos le permitió comprender que para ser campeón deberá pelear hasta la última vuelta de un campeonato que después de pasar por Qatar continuará su ruta en Arabia Saudita (otro circuito que hará su estreno en la máxima categoría) antes de cerrar la temporada en Abu Dhabi.
Entre los apostadores, el británico llega como candidato al triunfo (paga 1,65 dólares por cada uno apostado) y precede a Verstappen (paga 2,5 por cada dólar arriesgado), que irá en busca de su décima victoria en esta temporada en la que cosechó otros tres segundos puestos.
Al igual que en el campeonato, Bottas es el tercero en discordia también en las casas de apuestas luego de haberse adjudicado la pole tanto en México, como en Brasil a modo de despedida antes de pegar el salto a Alfa Romeo en la próxima temporada.
Uno de los que más festejó el triunfo de Hamilton en Interlagos fue el jefe del equipo Mercedes, Toto Wolff, quien una vez que el británico superó en pista a Verstappen para tomar la punta realizó gestos ampulosos a las cámaras que luego se viralizaron en las redes sociales.
"Amo ver ese espíritu de lucha del equipo encarnado en Toto, me hace muy feliz. Vi la imagen de su festejo y me hizo reír mucho.
Fue grandioso", dijo al respecto Hamilton.
"Es el líder del equipo y quieres ver eso de tu jefe, alguien que está ahí fuera, empujando y acompañándote. Me encanta que defienda de ese modo lo que siente que es correcto", completó el británico.
El que no parece tener dudas sobre quién será el campeón este año es el español Marc Gené, ex piloto de pruebas de Ferrari y actual comentarista televisivo, según el cual "Max es favorito sobre Lewis porque tiene una ventaja que puede manejar".
"Después del Gran Premio de Brasil todos dan como favorito a Hamilton, pero a mi entender Verstappen podrá regular sin problemas la ventaja que tiene en el campeonato hasta el final", reiteró.
Como sea, Gené coincidió en que este campeonato de la Fórmula 1 es el más atrapante de los últimos tiempos: "Hace 20 años que no disfrutaba tanto de un Mundial como en este y tenemos suerte de ser testigos de semejante definición".
Una puja que se traslada también a la Copa de Constructores, en la que Mercedes manda con 521,5 puntos y 11 de ventaja sobre Red Bull, mientras Ferrari, con 287,5, sacó ventajas en la disputa que mantiene con McLaren (256) gracias al quinto y sexto puestos logrados por el monegasco Charles Leclerc y el español Carlos Sáinz en Brasil.
"Llegamos bien a este fin de semana porque los últimos dos fueron alentadores en circuitos en los que habíamos sufrido en los últimos años", reconoció Leclerc.
"Trataremos de aprovechar ese envión anímico en el tramo final de la temporada y espero que este trazado se adapte mejor a mi estilo de manejo. No se cómo será correr aquí porque sólo lo recorrí el miércoles en bicicleta. Veremos mañana cómo lo siento", completó el monegasco.
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